OBRA SIN ROSTRO

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No conozco su rostro, sólo su obra y la sensibilidad de su alma. Un instructor de arte, profe de la creadora de este cuadro tejido con fibras naturales me dejó fotografiarlo y me contó la historia.

Resulta que Adelaine, es una de sus alumnas en una escuela especial “Año de la Educación” ubicada en Puriales de Caujerí, comunidad de San Antonio del Sur, municipio guantanamero que cuenta entre sus bellezas naturales con la loma del Pan de azúcar, el Abra de Mariana y la Salina de Baitiquirí.

Hasta allí se trasladó hace dos años a trabajar el joven Daniel Matos, integrante de la Brigada José Martí, motivado por un montón de sueños e ideas para llenar la vida estudiantil de alegrías y conocimientos. ¡Cuánto ignoraba acerca de la felicidad que le reservaba el destino en aquel centro escolar para niños con Síndrome de Down leve y moderado, autismo, retraso en el desarrollo psíquico y otras discapacidades ¡

Daniel, con la ayuda de los docentes, aprendió a aplicar Talleres de Creación acordes a las necesidades educativas especiales de los niños, quienes se motivaron desde el principio por las clases de pintura, danza y teatro. La dinámica incluía el conocimiento de la historia de la localidad, el Héroe Nacional de Cuba José Martí, mejorar el canto del himno nacional, la estética al vestir el uniforme escolar y otros objetivos relacionados al amor a la naturaleza y la patria.

Sólo una niña mostraba indiferencia, Adelaine.

Y es que para ella, lo único que interesaba, era el arte del tejido.

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Daniel: “En los programas curriculares de instructores  de arte no se incluye el aprendizaje del tejido, pero si la niña no quería pintar ni nada de lo que yo sabía, entonces me tocaba aprender y vincularla al taller creativo. Busqué en la comunidad a personas aficionadas al tejido y en horas de la tarde y la noche me dediqué por completo a conocer los secretos de cada técnica.

Con Yiraguana, una fibra natural típica de esta zona sanantoniense, aprendí a tejer sombreros, cuadros, bolsas y otros objetos  y extrapolé esos conocimientos a Adelaine. Imagine usted cuánta dicha y motivación logré en ella.”

Su primera creación, nacida de la imaginación y el amor al Apóstol, muestra una palma, una pluma y tintero. Cuando el profe Daniel le preguntó qué representaba para ella la singular obra, Adelaine respondió:

“ Esa es la pluma en la que Martí, debajo de una palma, escribió tantos cuentos y versos para los niños del mundo”

 

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Nota relevante: Hoy las paredes de los alrededores de la escuela mencionada en este trabajo muestran la inspiración de sus alumnos con murales que reflejan su amor a los símbolos patrios, la naturaleza, figuras animadas como Elpidio Valdés, valeroso mambí cubano y otras singularidades. Por el impacto cultural, político y social de esta institución, en marzo de 2014 será  declarada el centro más importante de la comunidad.

 

La dicha de un embarazo

Con 38 años logra la dicha de un embarazo
Con 38 años logra la dicha de un embarazo

Hace pocos días conocí a una guantanamera que irradiaba felicidad en su mirada y ademanes. Estaba hospitalizada en la mayor institución de salud de Guantánamo. Ustedes se preguntarán cómo es posible ese sentimiento en medio de un ingreso. Ahora les cuento…

Grisell Fajardo Pons, así se nombra, tiene 38 años. Desde muy joven dedica los días al cuidado de sus padres y a llevar con armonía un matrimonio de tres lustros. En silencio se abatía por no lograr un embarazo pero cedía su tiempo a responsabilidades domésticas para no pensar en un asunto cargado de miedos y dudas. En casa el tema no se tocaba, y cuando alguna persona preguntaba si tendría hijos, Grisell sonreía y decía que más adelante.

Su única confidente, una vecina de esas que se vuelven hermanas, la convenció de asistir a una consulta para parejas infértiles y aunque estaba en la edad límite de ese tipo de asistencia ante los riesgos que se derivan de un embarazo luego de los 35 años, el médico decidió realizarle estudios.

“Me hice todos los análisis y el médico dijo que todo estaba bien y ahí me dije: Tengo una esperanza”

Durante tres años Grisell y su esposo se realizaron diferentes análisis de sangre para valorar comportamientos hormonales, espermatogramas que evidenciaban la calidad del semen, ultrasonidos y la temida histerosalpingografía, prueba molesta para la mujer que permite visualizar mediante rayos X  el estado de las trompas de Falopio pues cuando hay obstrucción impiden un embarazo.

El diagnóstico arrojó la necesidad de atención médica desde el servicio de Urología a Alfredo, pareja de Grisell, quien no dudó en curar sus males para lograr el sueño de la paternidad con su esposa.

Para ella fue más difícil la detección de un diagnóstico, su menstruación irregular en demasía le impedía ciertos estudios, lo cual la deprimía y hacía abandonar consultas una y otras veces.

La perseverancia y apoyo de su amiga y vecina la empujaban nuevamente a cada estudio hasta que el especialista y jefe del programa de atención a la pareja infértil en la provincia, Ángel Ramos Casamayor le recetó Clomifeno, un inductor de la ovulación.

Luego de unos meses tomando ese fármaco apareció una rara hinchazón en sus piernas y mareos. Grisell, asustada, buscó al médico quien al practicarle un ultrasonido le dijo:

Médico: “Lo lograste. Ahora tienes que cuidarte mucho para que todo salga bien. Sabes que a tu edad hay riesgos, por eso ahora la dieta rigurosa y la mente libre de estrés son fundamentales”

Grisell: “Médico, este es hijo suyo también. No sabía a quien contarle porque ese día fui sola al hospital. No sabía si llorar, si reír o saltar. al llegar a mi casa y dar la noticia todos sintieron dicha…”

En este punto de la historia Grisell contagió a su entrevistadora con llanto. Veinte semanas de embarazo le saben a gloria y aunque una diabetes gestacional le obliga a rigurosas dietas más el ingreso bajo vigilancia médica, prefiere verse en el sitio seguro para ella y su futuro bebé. A ello le suma altas dosis de buen ánimo y positividad

Girsell “Claro que me voy a cuidar porque después de tanto sufrimiento y estudios quiero que todo salga bien y que mi hijo nazca sano. Quiero tener un embarazo y parto felices, bonitos.”

Pronto le dirán si su hijo es hembra o varón, pero luego de tanta espera, Grisell Fajardo no le exige sexo a la cigüeña, solo le pide salud porque gente para ayudarla abunda.

Por el camino de concepción y luz

infertilidadEn busca de una mejor atención a las parejas infértiles de la provincia de Guantánamo se organiza el servicio de consultas intermunicipales para garantizar el estudio adecuado de los problemas de salud que impiden la concepción de hijos.
Ello implica la disposición de locales y equipamiento en las policlínicas de cada municipio además de capacitar al personal de salud, labor en la que cooperan especialistas como el doctor Rogelio Rafael González sánchez, Jefe del Servicio de Reproducción Asistida del Hospital General Obstétrico de la Habana.
Durante el recorrido a las localidades guantanameros, el doctor Rogelio González junto a la bióloga Yailed Rodríguez, de la capital cubana, brindaron conferencias acerca del efecto negativo de los miomas uterinos en las mujeres y la importancia de la bioseguridad en el estudio de la infertilidad masculina.
Los visitantes evaluaron el avance en la construcción del Centro de Reproducción Asistida de Baja Complejidad del Hospital General Docente de Guantánamo que debe inaugurarse antes de concluir el año, el cual permitirá dar seguimiento a los casos que precisan inseminación artificial además de estudiar y remitir hacia la provincia de Holguín a las parejas con necesidad de fertilización in vitro.
Por último, el especialista comentó los planes del Ministerio de Salud Pública en Cuba de iniciar las ovodonaciones para beneficiar a las mujeres hasta 44 años, tema que ampliaremos en un próximo espacio informativo.